¿Cómo pueden ser tan diferentes dos productos cárnicos elaborados a partir de la misma parte del cerdo? Tanto el jamón serrano como el jamón cocido se consumen mucho y son protagonistas de las mañanas y meriendas de muchos españoles. Sin embargo, a la hora de elegir entre uno u otro, ¿Cuál de ellos es mejor?
Esta pregunta es mejor abordarla desde distintos puntos de vista: el de la elaboración, el nutricional, el del sabor y el del precio. Veamos cuál es el ganador en cada una de las categorías.
Elaboración de estos jamones
El jamón serrano se elabora curando las patas traseras del cerdo con sal y dejándolas envejecer durante meses o incluso años. Este proceso de curación genera un jamón con un intenso sabor, algo salado y un ligero toque ahumado.
Por otro lado, el jamón cocido se elabora sumergiendo las patas en una salmuera de agua, sales de nitrito y otros aditivos durante unos días para luego cocerlo lentamente. En ocasiones se somete a un ahumado y normalmente se envasa dentro de un envoltorio de plástico tras un prensado y moldeado.
A diferencia del serrano, el cocido no está compuesto al 100% por carne de jamón, pues los de categoría extra contienen entre un 85% y un 95% de esta. Solo por este detalle, puede decirse que el serrano es más natural y de mayor calidad que el cocido.
Diferencias nutricionales del jamón serrano o cocido
En cuanto a nutrientes, el jamón serrano tiene un contenido calórico de unas 250 kcal por cada 100 gramos y es rico en proteínas, grasas buenas monoinsaturadas y minerales como zinc, hierro y potasio.
El valor calórico del jamón cocido es menor, de unas 110 kcal por cada 100 gramos. Esto es debido a su menor contenido de grasas. También contiene una buena cantidad de proteínas, aunque inferior al jamón serrano.
Sabor y textura del jamón cocido o serrano
El jamón serrano tiene un sabor más intenso y complejo, con toques salados y ahumados. El jamón cocido tiene un sabor más suave y neutro.
En cuanto a la textura, el jamón serrano es más firme y fibroso, mientras que el cocido es más blando y jugoso.
Precio del jamón serrano y cocido
El precio del jamón serrano es bastante más elevado que el del jamón cocido, que resulta más asequible y es uno de sus puntos fuertes. De hecho, el precio del mejor jamón cocido suele ser inferior al del jamón serrano más común.
¿Cuál de los dos es mejor?
Aunque el jamón serrano es más beneficioso desde el punto de vista nutricional no significa que consumir el cocido sea malo. Lo ideal es alternar ambos tipos de forma equilibrada dentro de una dieta saludable.
Un buen consejo es elegir un producto de buena calidad, con la menor cantidad posible de sal y, muy importante, complementar su consumo con frutas, verduras y cereales integrales. De esta forma podremos disfrutar de uno de los manjares de nuestra gastronomía de forma responsable.
En definitiva, la elección entre un tipo y otro de jamón depende, en gran medida, del presupuesto y los gustos de cada persona.