Si entras en una jamonería o en la zona de un hipermercado dedicado a los jamones, seguramente no tengas ni idea de cuál elegir. Los de mayor calidad suelen destacar por su cuidada presentación y sus precios altos, pero muchas marcas económicas también se esfuerzan por ofrecer un aspecto exclusivo para captar tu atención.
Por eso, conocer algunos puntos clave en los que fijarte antes de decantarse por un jamón es fundamental para que compres el mejor basándote en tu presupuesto.
Etiqueta y precinto del jamón
Buscar la etiqueta oficial es el primer paso, pues nos indicará la calidad del jamón. La etiqueta puede ser negra para el jamón ibérico de bellota, roja para el de cebo, verde para el cebo de campo y blanca para el de cebo.
La etiqueta también nos muestra su denominación de origen, si la tiene, y otros datos como la raza, los meses de curación y el tipo de alimentación.
Aspecto externo de los jamones
El aspecto externo del jamón también dice mucho y puede ayudarte a tomar una decisión.
La caña debe ser fina y estilizada, fruto de un buen desarrollo y aprovechamiento del cerdo.
La pezuña debe mostrar un color negro y desgaste si el animal ha pastado en libertad.
Algunos expertos consideran que el tamaño ideal de un buen jamón ronda los 8 kg, pero la calidad no siempre va en proporción con el tamaño.
En cuanto a la grasa, ha de ser brillante y amarilla de forma uniforme.
Aspecto interno de un jamón
Una vez cortado, debemos fijarnos en su aspecto interno. El color del magro ha de ser rojo intenso y brillante.
La distribución de la grasa infiltrada es importante. Si se muestra en forma de finas vetas blancas repartidas de forma homogénea, suele ser un indicativo de calidad.
La textura tampoco puede ser una excepción, ha de notarse firme pero sin excesiva dureza. Si tienes la oportunidad de degustar el jamón, sin duda lo tendrás más claro para comprarlo.
Preguntar a un experto en jamones
Dado que hay muchas opciones y calidades, no está de más recurrir al consejo de un experto en la tienda. Él podrá recomendarte la pieza que mejor se ajuste a tus preferencias y presupuesto.
Un profesional conocedor del producto te mostrará los beneficios de comprar un buen jamón y te salvará de invertir mal tu dinero.
Fíjate en la marca de los buenos jamones
Es conveniente que te fijes en marcas con solera y prestigio en la elaboración de jamones. Aquellas que llevan años trabajando con métodos artesanales y materias primas de calidad suelen ser la mejor garantía.
Ten en cuenta el precio del jamón
Aunque no siempre se cumple, un buen jamón suele tener un precio alto. Desconfía de las piezas cuyo bajo precio resulte demasiado atractivo, pues probablemente no se corresponda con su calidad real. Un jamón premium merece una inversión razonable.
¿Cómo lo vas a consumir el jamón?
Para un consumo durante varios días puedes llevarte una pieza entera a casa y ahorrar en el precio por peso. Si, por el contrario, vas a consumirlo de forma ocasional, puedes optar por lonchas precintadas al vacío.